Se acaba el 2011 y habrá que hacer balance. Podemos decir sin caer en la exageración que el Athletic está instalado en una tranquilidad deportiva e institucional. Una cómoda clasificación en la Liga, con un juego que permite ser optimistas ante el futuro inmediato, primero de grupo en la Europa League y con paso firme en la Copa. En el apartado institucional, nunca un presidente y una junta directiva han tenido el consenso que tienen Josu Urrutia y sus colaboradores. Deberán tomar decisiones y estar a la altura de los retos inmediatos a que se enfrentan. Las renovaciones de Fernando Llorente y Marcelo Bielsa tienen que ser prioritarias. En entrenador de Rosario ha conseguido ilusionar de nuevo a la afición con su apuesta por un fútbol atrevido y de ataque. Y Fernando Llorente tiene que ser el referente del Athletic en los próximos años. Hay jugadores, un competente e ilusionante cuerpo técnico y una junta directiva sin fisuras y con un amplio conocimiento del club. Hay futuro.
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